La puntería 1 VEN ORD 1

La puntería

Te son perdonados. En griego no está escrito “perdonar” sino “remitir”. El verbo afìemi indica el remitir la deuda, ponerla a cero, cancelarla. Es el mismo verbo del Padre nuestro. El perdón de Dios no es sólo un acto de compasión, sino una regeneración pneumopsicosomática. El perdón de Dios es un acto de restablecimiento, es un ser conducidos a la Fuente.
Tus pecados. En realidad amartìa en griego no significa “pecado” sino “error”, más precisamente “error de puntería”. Amartìa es equivocarse en la puntería, no en el sentido de no lograr dar en el centro de un blanco por un error de puntería, sino en el sentido de un error fundamental en la elección del blanco. Para Jesús el pecado es un error, una equivocación de puntería interior, un error profundo y espiritual en la elección del objetivo de nuestra puntería y de nuestra atención, una desviación en la elección intelectual y emotiva del blanco. El pecador es aquel que comete un error en la elección del objetivo.
El perdón de Dios es capaz de disolver y cancelar la deuda, cada deuda personal y colectiva que el hombre madura con respecto al amor y a la belleza, a la gracia y a la armonía, en acciones donde está completamente equivocado y mortal, inarmónico y erróneo, el blanco de su puntería.