En esta sección cada día es posible encontrar una reflexión sobre el Evangelio del Día.

Martes 4 Enero 2022

Palabra del día
Evangelio de Juan 1,35-42

Fijando la mirada

Es fijando la mirada que nos enamoramos. Es fijando la mirada que se decide. Es fijando la mirada que se ama, que se aguarda, que se conoce, que se reza, que se medita. Es fijando la mirada que se decide perdón o venganza, compasión o rencor. Es fijando la mirada que se ve más allá o se decide no mirar más hacia esa parte. Es fijando la mirada que Juan Sumergidor logra ver a Jesús hasta dentro del corazón y lo reconoce como el Cordero, el apacible, humilde, divino Cordero de Dios. Es fijando la mirada en él que logra anunciarlo a sus discípulos de manera tan liberadora y potente que crea una nostalgia infinita en quien lo escucha. Es fijando la mirada que Jesús, el Maestro, ama a Pedro, lo mira dentro, lo elije, lo redefine, lo hace renacer desde dentro como Cefas. Es fijando la mirada en él que día a día nos enamoraremos de él, hasta el punto que él y sólo él vivirá en nosotros, dentro de nosotros, y nosotros estaremos sumergidos en él, porque nosotros somos aquellos en los cuales él ha fijado la mirada, su mirada desde la eternidad y para la eternidad.
Cuando sentiremos encima y dentro de nosotros su mirada de amante, entonces la consciencia nos concederá volvernos lo que somos, hijos de Dios.