En esta sección cada día es posible encontrar una reflexión sobre el Evangelio del Día.

Viernes 10 Marzo 2023

Segunda semana de Cuaresma

Palabra del día
Evangelio de Mateo 21,33-43.45-46

Piedra Angular

¿Cómo detener a Jesús? ¿Cómo frenar su onda? ¿Cómo capturar sus pasos, bloquear su gesto, congelar el sonido de su voz?
En toda la historia de la humanidad jamás se ha gastado tanto en proyectos, dinero, persuasión, comunicación, organización como en estos dos mil años, con la única finalidad de capturar a Jesús, apagar su inspiración, su luz, su voz. Jamás ningún proyecto humano ha recolectado tantas adhesiones, tanto empeño, tanta profusión de energía por así tanto tiempo y con tanta intensidad. Pero, ¿por qué tanto empeño para detenerlo? Porque Jesús no es una creación de los sistemas humanos, ni siquiera de aquellos prepósitos a la más elevada iluminación y espiritualidad. Jesús no es una bandera que ondea según los vientos de la historia, de los imperios, de las convenciones, de las leyes, de las morales, de las tradiciones, de los sistemas políticos, económicos, de las ideologías y de las religiones de proveniencia humana. Jesús no es la bandera que ondea según el viento. Jesús es el viento, el viento de Dios que empuja todo y cada cosa hacia los brazos del Padre. Ninguno, absolutamente ninguno ha sido nunca más capaz de capturar a Jesús, de arrestarlo, de hacerlo callar después de los días de su resurrección. Lo han intentado con el miedo, el oscurantismo, el fanatismo moral, con la hipocresía, con la persecución, con la ignorancia, con la ley, con el fuego de la hoguera, con las torturas de la inquisición pero no lo han logrado. Lo han intentado transfiriéndolo dentro la jaula de una religión, entre las mordazas de la institución, congelándolo en dogmas y obscureciéndolo entre los corredores tétricos y envenenados de la jerarquía dedicada al poder y a la riqueza, pero no lo han logrado. Jesús no es una creación humana, no es una creación de los sistemas mentales humanos, ni siquiera de aquellos más religiosa y espiritualmente desenfrenados y evolucionados. Jesús ya no se puede capturar, ya no se puede detener porque él está al centro y es el centro vital de todo lo que vive, es la bisagra de toda sapiencia, la piedra cabecera de ángulo del universo y del corazón del hombre. El universo y el corazón del hombre han sido construidos sobre la piedra angular que es Jesús. De nada sirve descartar continuamente de nuestra vida esta piedra celestial sobre la cuál todo está fundado, sirve sólo para disminuir la velocidad de nuestra espléndida evolución hacia la luz de Dios y a prolongar la agonía de los pobres en manos de la estupidez y de las intrigas de los poderosos. Pero hay una fuerza que los poderosos no han considerado nunca en la potencia de Jesús, aún si siempre la han temido. Es la fuerza de la gente, de la gente cuando se despierta a la luz de la fe y comienza a creer con toda la fuerza en la fuerza del creer, en la fe absoluta en la Palabra de la Piedra Angular que es Jesús, superando las trabas de la jerarquía y de las instituciones.
Jesús es la Piedra Angular descartada por los sistemas del mundo, pero es la piedra que está en los fundamentos de la construcción de la nueva humanidad, de cada construcción en el amor y en la paz. Jesús es Piedra Angular porque es la piedra de viraje del más potente y gigantesco ángulo de viraje de la historia humana.
Bendita eres desde siempre y por siempre Piedra Angular.