En esta sección cada día es posible encontrar una reflexión sobre el Evangelio del Día.

Martes 14 Marzo 2023

Tercera semana de Cuaresma

Palabra del día
Evangelio de Mateo 18,21-35

Medida

Un ser humano consume alrededor de 555 litros de oxigeno al día. Esta es la medida de cuánto necesita el hombre para satisfacer la primera de las necesidades fisiológicas y permanecer en vida. Se trata de un dato fisiológico, es un dato de creación que nos indica cómo funciona y cómo tienen que funcionar las cosas si queremos que todo funcione.
Ahora, si un partido, una ciencia, una cultura, una religión buscaran convencer a la humanidad que, según sus opiniones e investigaciones, convenciones, intereses y dogmas, la medida cotidiana de oxigeno necesaria para la supervivencia de un hombre adulto es de 5 litros y no de 555, nuestro cuerpo, nuestra fisiología ¿dejaría de respirar sus casi 555 litros de oxigeno cotidianos?
Solo quien todo conoce y todo ha creado puede dictar las medidas de cómo todo funciona, las otras son opiniones inauditas, vacías, ineficaces, mortales.
Según Pedro la medida es siete, según Jesús la medida es setenta veces siete. Medidas diferentes dependen de perspectivas diferentes, conocimientos diferentes, objetivos e intereses diferentes.
Según la manera de pensar de Pedro, si nuestro hermano incurre en faltas en contra de nosotros, siete son las veces que tenemos que perdonarle para vivir en paz, para vivir en Dios, para vivir en la luz.
Según Jesús, si un hermano incurre en faltas en contra de ti, setenta veces siete es el número de veces necesario para misericordiar - término utilizado por Jesús - el hermano si quieres vivir en paz, si quieres vivir en Dios, si quieres vivir, si no quieres morir.
Setenta veces siete - numero que marca el infinito - significa que, si no respiras amor y perdón en continuación, mueres, es un dato de funcionamiento, es física, no metafísica, son instrucciones para el uso, no religión.
Según Pedro, para vivir en el amor, es suficiente respirar perdón siete veces, según Jesús, para vivir en el amor y no morir en el cuerpo y en el alma, el numero de veces en el cual tenemos que respirar misericordia para ofrecer a los hermanos es infinito, como infinitas son las veces en las cuales el Padre misericordia y nos perdona.