En esta sección cada día es posible encontrar una reflexión sobre el Evangelio del Día.

Jueves 18 Julio 2024

Decimoquinto semana del Tiempo Ordinario

Palabra del día
Evangelio de Mateo 11,28-30

Zugòs

Es la suavísima y conmovida invitación di Jesús a irse con él, a dejarse llevar por él. Es la suavísima y conmovida invitación de Jesús a irse con él, a dejarnos llevar por él, después de haber buscado y tocado endondequiera y habernos encaminados hacia metas falsas e inexistentes, sumetiéndonos a miles y miles de padrones para ganar sólo cansancio infinito y toda especie de opresión, humiliación, sufrimiento y esclavitud. Es la suavísima y conmovida invitación di Jesús a todos los que, después haberse extraviado por dondequiera, en búsqueda de la felicidad, de la paz, del bienestar, de la salud, y después haber entregado, llenos de esperanzas y de esperas, toda su vida y sus recursos a los que nada han dado y todo han quitado, ahora están hartos y oprimidos en la mente, en el cuerpo y en el espíritu. Es la suavísima y conmovida invitación de Jesús a todos nosotros que, así desconectados de Dios y decentrados de nosostros mismos, nos hemos apoyado a quienquiera para obtener un poquito de seguridad, energía, importancia, perdeindo honor, dignidad, libertad, nobleza y fuerza. Es la suavísima y conmovida invitación de Jesús a tomar sobre nosotros su (v.30) yugo suave, en griego zugòs chrestòs. Zugòs chrestòs no significa propiamente yugo suave sino, más literalmente, “vínculo [zugòs] útil-indispensable-siempre a mano [chrestòs]”. Jesús nos invita a atarse a él con el vínculo indispensable-útil del amor, porque sólo haciendo así podemos recibir de la vida todo lo mejor que deseamos, y mucho, mucho más. Es la suavísima y conmovida invitación de Jesús a irse con él después haber desperdiciado todas nuestras energías y fuerzas en la búsqueda jadeante de la luz donde hay engaño, del amor donde hay posesión, de las energías vitales donde hay sólo sed de dominio y robo, porque él está listo para ofrecernos amparo y paz, energía y fuerza para la mente, para el cuerpo y para el espíritu. Es la suavísima y conmovida invitación de Jesús a atarnos a él para aprender de él que es mite.
(v.38) Vengan a mí es venid hacia mí, donde aquel “hacia” es la traducción del griego pròs con el sentido de movimiento hacia lugar, que aquí está a indicar un movimiento continuo mental y espiritual en dirección de Jesús. Ser mites significa por lo tanto estar siempre, perfectamente, constantemente orientados, dispuestos, direccionados en modo pacífico hacia Dios-Amor, hacia la unión, la unidad. Ser mites es ser orientados siempre hacia Dios y, cualquier cosa ocurra o no ocurra, no entrar nunca en revuelta con él.
Venid a mí es la suavísimo y conmovida invitación de Jesús a atarse a él para aprender de él que es humilde de corazón, humilde adentro. Humilde, en sentido evangélico, es él que reconoce la proveniencia de todo lo que existe y de eso está siempre, profundamente agradecido. Humilde es él que sabe siempre que todo, siempre, viene de las manos de Dios como un don y una oportunidad de amor y paz. Venid a mí es la suavísima y conmovida invitación de Jesús para todos los que están cansados de estar cansado, que están cansados de estar oprimidos, que están cansados de no tener recursos y bienestar, paz y gozo, salud y armonía y desean finalmente el amparo y el gozo de Dios.